Esta semana fue de cambios y muchas sensaciones encontradas para los que trabajamos en la escuela. Por un lado, Fernando Solari, nuestro rector desde 2014, tomó licencia para asumir el cargo de supervisor. Nos hubiera gustado despedirlo como se merece, en un acto en el patio como siempre hacemos con quienes dejan la escuela y, ¿por qué no?, con nuestro clásico ágape con gaseosa y sanguchitos en la sala de profes 😉. El contexto no lo permitió, así que aprovechamos este espacio para desearle la mayor de las suertes en este nuevo desafío.